LA ILUMINACIÓN NO PUEDE SER PRESTADA.
A LO SUMO, PUEDE SER COMO UN RELÁMPAGO EN UNA NOCHE OSCURA;
NO
PUEDE CONVERTIRSE EN UNA LUZ PERMANENTE.
PERO EN UNA NOCHE OSCURA,
CUANDO VAS A TIENTAS Y DE REPENTE
SALTA UN RELÁMPAGO;
TODO RESULTA CLARO POR UN INSTANTE.
ENTONCES LA LUZ SE APAGA,
PERO EL RESPLANDOR LO HA CAMBIADO
TODO.
AHORA SABES QUE EL CAMINO EXISTE.
PUEDE QUE AÚN NO ESTÉS EN EL CAMINO.
PUEDE QUE EXISTAN MIL Y UNA BARRERAS,
PERO SABES QUE EL CAMINO
EXISTE.
SIMPLEMENTE SABER QUE EL CAMINO EXISTE,
ENCIERRA UN GRAN LOGRO
PORQUE DISUELVE LAS DUDAS,
DESAPARECE LA INCERTIDUMBRE,
DEJAS DE VACILAR.
SURGE LA FE, SURGE LA CONFIANZA.
EL CAMINO EXISTE;
ESTO SE CONVIERTE EN ALGO QUE ECHA RAÍCES MUY
PROFUNDAS EN TI.
AHORA YA NO CREES POR LOS DEMÁS;
SABES POR TI MISMO.
PUEDE QUE AHORA SE HAYA CONVERTIDO EN UN RECUERDO,
PERO ESE
RECUERDO TE GUIARÁ,
TE CONDUCIRÁ.
AHORA CAMINARÁS EN LA DIRECCIÓN CORRECTA;
HABRÁS DEJADO DE ANDAR
TANTEANDO A CIEGAS.
SABES DÓNDE ESTÁ EL CAMINO.
NORTE, SUR, ESTE...
EMPEZARÁS A TANTEAR EN LA DIRECCIÓN CORRECTA
SABIENDO QUE ESTÁ AHÍ.
ES SÓLO CUESTIÓN DE TIEMPO.
LLEGARÁS.
OSHO